Descripción
El ácido hialurónico es un glicosaminoglicano aniónico, no sulfatado ampliamente distribuido a lo largo de los tejidos conectivos, epiteliales y neurales. Es el único de los glicosaminoglicanos de los que millones están presentes en la membrana plasmática, en su forma no sulfatada.
El ácido hialurónico se encuentra en muchos tejidos del cuerpo, tales como la epidermis, dermis y cartílagos. Es un componente importante de los cartílagos articulares, puesto que es responsable por su resiliencia (resistencia a la presión) y está presente como una capa alrededor de cada célula. También es uno de los mayores componentes de la epidermis y de la dermis en las que está involucrado en la protección, resistencia y reparación de los tejidos. Cuando la piel está expuesta excesivamente a rayos UVB, humo, polución y el proceso natural de envejecimiento, las células de la piel dejan de producir tanto ácido hialurónico y, especialmente con el envejecimiento, aumenta el nivel de su deterioro.
Además, el ácido hialurónico se ha usado en la medicina, entre otros, para el tratamiento de la osteoartritis de la rodilla inyectándolo en la articulación. También se aprobó su uso para la cirugía ocular (tales como el transplante corneal, operación de la catarata, glaucoma y reparación del desprendimiento de retina). Por tanto, podemos asumir que el ácido hialurónico es adecuado para la aplicación biomédica en el cartílago, dermis y epidermis con resultados óptimos, es un material biocompatible, el procedimiento es rápido y cómodo y sus efectos son seguros y no permanentes.
RETICULACIÓN
El ácido hialurónico lineal ( no reticulado), tiene una vida relativamente corta tras su inyección en el cuerpo. Las técnicas de elaboración especiales han desarrollado de modo que se amplíe la longitud de la cadena del ácido hialurónico y se estabilice la molécula para resultados más duraderos tras su aplicación médica. Por tanto, se creó un procedimiento químico introduciendo una proteína en la solución, creando la bien conocida reticulación del ácido hialurónico.
El deterioro del ácido hialurónico se hace más lentamente y los resultados obtenidos tras la inyección fueron definitivamente más largos que en el caso del tipo lineal.
NUEVA VIDA A LA PIEL
El ácido hialurónico reticulado combina con miles de moléculas de agua expandiendo las depresiones cutáneas, arrugas y cicatrices donde se inyecte. Al mismo tiempo, hidrata las células alrededor de la aplicación y le proporciona al paciente resplandor y una apariencia sana.
My Filler cuenta con la tecnología de reticulación la que garantiza un rendimiento superior del ácido hialurónico tras su inyección: longevidad y retención de humedad. Otra característica importante de es la fluidez del producto. A diferencia de productos de otras empresas cuya inyección es difícil por la alta viscosidad, la inyección es suave y cómoda. La jeringuilla personalizada de color azul/transparente con una forma única del pistón ofrece mejor control, seguridad y fácil manejo para el operador y, a consecuencia, un procedimiento cómodo para el paciente.
ELABORACIÓN
Creado y desarrollado por un equipo altamente cualificado en Italia en uno de los laboratorios y centros de investigación más modernos, My Filler usa un protocolo de reticulación muy seguro en el que los residuos y las impurezas son prácticamente ausentes. Cada fase de la producción está hecha en un ambiente estéril (cámara estéril) lo que garantiza la pureza final del producto. La composición de My Filler cuenta con una selección particularmente elaborada de diferentes tamaños moleculares de partículas de ácido hialurónico que proceden de soluciones de diferente viscosidad y concentración de ácido hialurónico. La composición compleja cubre todos los resultados posibles y deseados de un tratamiento estético facial.
¡Los resultados son increíbles!
• Duradero en la zona inyectada
• Gran capacidad hidrofílica
• Moldeable en la zona quirúrgica
• Estabilidad tras la operación
